Aquellos instantes del año en que el Sol alcanza el valor extremo de su declinación (distancia aparente al ecuador celeste), aproximadamente +23.45º en el llamado solsticio de Cáncer y -23.45º en el solsticio de Capricornio. En los solsticios el Sol se encuentra en el cenit al mediodía sobre los paralelos terrestres denominados trópicos. En las proximidades de los solsticios parece que el Sol apenas se moviera respecto a las estrellas, de ahí su nombre en latín solstitium que quiere decir «Sol quieto». El paso del Sol por estas posiciones marca, cuando se encuentra en el de Cáncer, el comienzo del verano en latitudes boreales (hemisferio norte) y el comienzo el invierno en latitudes australes (hemisferio sur) y lo contrario cuando se encuentra en el de Capricornio.