Allá por 1994: primer Boletín de la SEA
El 31 de mayo de 1994, hace poco más de 30 años, se publicó el primer “Boletín Informativo” de la Sociedad Española de Astronomía. Los autores de este pequeño artículo fuimos los editores de ese número, que os animamos a leer por su valor histórico. Recordamos perfectamente la primera reunión que tuvimos para decidir los contenidos y el formato de ese Boletín: aprovechando el paso de uno de nosotros (XB) por Madrid, una habitación de hotel fue la redacción improvisada para la primera publicación de la SEA… y así fue como arrancamos.
Algunos datos para poner en contexto los años en que comenzamos esa andadura: la SEA se creó en 1992 en una asamblea constituyente a la que asistieron 39 miembros fundadores -de los cuales solo tres eran mujeres-, faltaban dos años para que el legendario International Ultraviolet Explorer (IUE) dejara de funcionar después de 19 años en órbita -¡y un ordenador a bordo con solo 12 Kb de capacidad!-, tres años para el descubrimiento del primer exoplaneta, 51 Peg b, en torno a una estrella similar al Sol, cuatro para que se tuvieran evidencias sólidas de la expansión acelerada del universo, cinco para el lanzamiento del observatorio espacial XMM-Newton; entretanto el GTC era aún una entelequia, y España no era miembro de ESO.
En ese primer Boletín se anunciaba que en septiembre de 1994 se celebraría la II Asamblea Ordinaria de la SEA que tendría lugar en Alicante y que iría acompañada en paralelo de “cuatro sesiones científicas, consistentes en una o dos conferencias invitadas sobre un tema de actualidad o de gran interés y un review y discusión de los pósters por un especialista en el contenido de cada sesión” (entrecomillamos aquí y en adelante los textos literales del Boletín). Los temas elegidos para las sesiones científicas fueron el “telescopio español de 8 metros”, “la cosmología y astronomía extragaláctica”, “estrellas y medio interestelar”, y “sistema solar e instrumentación” . Esas sesiones compusieron formalmente la I Reunión Científica de la SEA, uno de los pilares de la Sociedad, a la que seguieron otras catorce: San Sebastián, La Laguna, Santiago, Toledo, Granada, Barcelona, Santander, Madrid, Valencia, Teruel, Bilbao, Salamanca, la virtual de 2020, y de nuevo La Laguna. En poco menos de un mes celebraremos en Granada la XVI Reunión.
Dos recortes del primer boletín de la Sociedad Española de Astronomía.
Es interesante echar una ojeada en ese primer número a la sección de la Comisión de Información porque, sobre todo los más jóvenes, descubriréis en ella términos técnicos sorprendentes y arcanos para quienes prácticamente habéis nacido con un móvil en las manos, usáis cada día técnicas de inteligencia artificial y programáis en python de forma fluida. Los medios técnicos de la época -compusimos ese primer Boletín en LaTeX- nos sorprende hasta a nosotros. En esa sección se habla de servidores gopher, de conexión telnet, de un protocolo HTTP, entonces casi embrionario, y de una aplicación llamada Mosaic, “un lector de hipertexto que soporta (casi) todos los protocolos de acceso a la información de internet: mail, telnet, ftp, gopher, HTTP, news, etc. Con él pueden visualizarse documentos en hipertexto (texto+imágenes+sonido) y una amplia gama de posibilidades”. En el primer párrafo de este artículo mencionábamos el valor histórico de ese primer modesto Boletín, pero visto en perspectiva casi podríamos hablar de su valor prehistórico.
El Boletín ha pasado por dos épocas distintas, como podréis comprobar en los PDFs que están disponibles en la página web de la SEA. La primera etapa contó con ocho números, ahora identificados con números romanos del I al VIII. En el III se unió Xavier Luri al equipo editorial y apareció por primera vez el logo de la SEA en su portada, y en el VII Ignasi Ribas se unió para formar un cuarteto de editores. El número de noviembre de 1998, con un nuevo formato y más contenidos, se renumeró como “Volumen 1, Número 1”. La idea original al etiquetar ese Boletín con “Volumen 1” era recopilar los artículos científicos que iniciamos en ese ejemplar de manera similar a las publicaciones “serias”, agrupándolos después en un volumen cada cierto número de ellos… la realidad es que esto nunca sucedió.
El Boletín 21 fue un especial dedicado en gran parte al Año Internacional de la Astronomía 2009; como curiosidad, aparece en la portada el anuncio de una propuesta de votación para el nuevo logo de la SEA; en la página 1 se ofrecieron tres versiones, y fue la segunda, en azul y blanco, la elegida y que aún hoy usamos. En esa misma página se anunció que por fin la SEA inauguraba una página web con el dominio www.sea-astronomia.es y se puso en funcionamiento SEAMOS. Ese paso fue fundamental para la organización de toda la información que la SEA deseaba poner a disposición de la comunidad y para la propia cohesión de nuestro colectivo.
El Boletín dio otro paso cuantitativo y cualitativo a partir del número 24, editado en la primavera de 2011, a todo color, con una maquetación más moderna y atractiva, y dejó de imprimirse en papel… y aquí estamos, celebrando el Boletín número 50 contando solo los publicados en la segunda época.
Durante estos años los equipos editoriales que han llevado el Boletín a su versión actual han sido cambiantes, amplios y diversos. Eso ha hecho muy visible que es la SEA en toda su amplitud quien ostenta la propiedad de este Boletín. En todos los números se incluye la composición de los equipos editoriales, cada vez más numerosos para proporcionar a los Boletines más contenidos. Permitidnos, como editores de los primeros números, que agradezcamos a todas las personas que han colaborado y colaboran en la elaboración de este instrumento de comunicación de la SEA; y los mejores deseos de éxito para aquellas que vayan tomando el relevo en el futuro.